Muchos solemos creer que la ciencia y la tecnología son lo mismo, pero la realidad es que son conceptos completamente diferentes y que se complementan el uno del otro.
Hay que saber que la ciencia se trata de algo mucho más nuevo que la tecnología porque incluso desde mucho antes de la aparición del hombre.
La tecnología empezó cuando un ser se dio cuenta de que era más sencillo habitar el mundo que lo rodea con ayuda de artefactos, para comenzar a sembrar a vestir o a comenzar a construir las primeras poblaciones y pueblos.
La necesidad de ir mejorando cada una de estas herramientas es lo que dio inicio a la ciencia. Necesitas observar y establecer métodos, teorías para comprender el funcionamiento del mundo y así poder encontrar avances que te ayuden a mejorar la calidad de vida.
En ese sentido nos puede quedar claro que la tecnología fue primero que la ciencia, pero que ahora, para que exista, la otra es sumamente necesaria. Sin el análisis de un problema tal vez no tendríamos los avances tecnológicos que existen, pero sin la tecnología no habríamos empezado a buscar mejoras.